Desde la época, de ávido lector infantil, siempre me gustó el cuento, como género literario.
Luego cuando comencé a escribir, ya adolescente, lo seguí prefiriendo por encima de la novela y los ensayos, mis otros dos géneros predilectos.
Pero cuando me torné escritor profesional y corrector de estilo, hubo un cambio radical en mi óptica de apreciación.
Y esto se debió en gran medida, a que por el camino, fui animado a dictar un Taller Literario con soporte técnico, en la Biblioteca Municipal de Ciudad del Este.
Y esto se debió en gran medida, a que por el camino, fui animado a dictar un Taller Literario con soporte técnico, en la Biblioteca Municipal de Ciudad del Este.